Los/as autores/as parten de la siguiente introducción:
Cualquier sugerencia de que el aprendizaje de una lengua de signos será cognitivamente dañino para los/as niños/as sordos/as, y cualquier recomendación social o educativa basada en dicha sugerencia, son perjudiciales en el sentido de que son posiciones desfavorables a las que se llega sin conocimiento o razón (Any suggestion that learning a sign language will be cognitively harmful to deaf children, and any social or educational recommendations based on such a suggestion, are prejudicial in that they are unfavourable positions arrived at without knowledge or reason)
Los prejuicios más importantes que los/as autores/as han detectado en profesionales médicos son los siguientes:
- Que la lengua de signos es difícil de aprender.
- Que el bilingüismo bimodal tiene efectos negativos
- Que las lenguas de signos son inferiores por no tener una representación escrita
- Que la lengua de signos dificulta el aprendizaje de la lectura
- Que las tecnologías de la audición y los implantes cocleares son suficientes para cubrir las necesidades de los/as niños/as
- Que la lengua de signos aleja a los/as niños/as sordos/as de sus familias
1. La lengua de signos no es difícil de aprender
Muchas familias y profesionales temen que nunca aprenderán la lengua de signos lo suficientemente bien como para ayudar en el desarrollo de los/as niños/as sordos. Sin embargo, ninguna investigación demuestra que aprender la lengua de signos sea más difícil que aprender cualquier otro idioma. La motivación es un componente importante en el aprendizaje de cualquier idioma y, de hecho, las familias probablemente se encuentren muy motivadas para comunicarse de forma efectiva con sus hijos/as sordos/as.
Las familias no tienen que ser modelos lingüísticos para sus hijos/as si cuentan con otros modelos fuera de la familia con los que aprenderán la lengua de signos sin dificultad. Además, las familias que usan la lengua de signos tienen un intercambio lingüístico más rico que las familias que sólo utilizan la lengua oral.
2. El bilingüismo bimodal tiene efectos positivos
No existe ningún estudio científico que avale la creencia de que el bilingüismo es negativo para el desarrollo infantil, es únicamente un prejuicio. De la misma manera el bilingüismo basado en la lengua oral y la lengua de signos tiene los mismos efectos positivos que el aprendizaje de dos idiomas orales, por ejemplo, inglés y español. De hecho, cada vez más investigaciones demuestran que las lenguas de signos potencian el desarrollo del habla en los/as niños/as sordos/as, muy lejos de la creencia de que perjudica a su desarrollo oral.
3. Las lenguas de signos no son inferiores aunque no se escriban
Sobrevalorar la alfabetización escrita de cualquier lengua es un error. Hay evidencias científicas de otras formas de alfabetización oral en idiomas de Australia, África o Rusia, y centrarse estrictamente en la alfabetización escrita pone en riesgo la importancia de las habilidades de comprensión narrativa o del conocimiento del mundo, por ejemplo.
4. La lengua de signos facilita el aprendizaje de la lectura
Hay amplias y diversas investigaciones que demuestran que la fluidez en la lengua de signos conduce a mejores habilidades de lectoescritura de la lengua oral. Las posiciones ideológicas que desprecian las contribuciones de una lengua de signos al éxito de la lectoescritura hacen que los niños sufran daños por tolerancia cero a enfoques alternativos.
5. Los implantes cocleares no son suficientes
Los resultados del implante coclear varían y presentan un número significativo de fracasos.Sus beneficios en el desarrollo del habla no son precisos y la afirmación de que el fracaso del implante coclear se deba a la lengua de signos no tiene ningún fundamento.
Los/as autores/as también se refieren a un reciente estudio que culpaba a las lenguas de signos de un peor desarrollo en el habla, mostrando errores que también se han tratado en otro artículo de Escuelas Excepcionales: el estudio contra la lengua de signos que oculta una falacia.
6. La lengua de signos fortalece los vínculos familiares
Se ha demostrado que los/as niños/as sordos que crecen en entornos bilingües y que pueden comunicarse con sus madres y padres en lengua de signos tienen mayor probabilidad de desarrollar vínculos familiares más fuertes y saludables que aquellos/as que no llegan a hablar o escuchar suficientemente bien.Hay informes que indican que algunas personas sordas oralizadas y las familias oyentes de niños/as sordos/as desearían haber tenido la oportunidad de aprender antes la lengua de signos, pero se les recomendó que no lo hicieran y esto es un error porque las investigaciones demuestran que La capacidad de los niños sordos para comunicarse de manera efectiva y fácil con los demás es fundamental para la salud mental (ver, por ejemplo, aquí y aquí).
CONCLUSIONES
Los/as autores/as enfatizan la importancia de incluir la lengua de signos y conocimientos básicos sobre el lenguaje en los estudios universitarios relacionados con las ciencias médicas para evitar estos prejuicios y afirmaciones sin fundamento. Asimismo, el asesoramiento a las familias con niños/as sordos/as debe incluir la recomendación de introducir la lengua de signos tan pronto como se detecte la pérdida auditiva.Fuente:
- Humphries, T., Kushalnagar, P., Mathur, G., Napoli, D. J., Padden, C., Rathmann, C., y Smith, S. (2017). Discourses of prejudice in the professions: the case of sign languages. Journal of Medical Ethics, medethics-2015-103242. En línea: http://jme.bmj.com/content/early/2017/03/09/medethics-2015-103242 [último acceso: 14/11/2017]
0 Comentarios